viernes, 17 de febrero de 2012

Procesión



LA EMOTIVA PROCESION

Después de la celebración el Sr. Obispo encabezó, como ya es tradicional, una procesión con la venerada imagen de Nuestra Señora que llevaron en andas los Portadores de la Virgen.

Una multitud impresionante y conmovida se reunió en torno al recorrido de la querida imagen. Mientras se echaban a vuelo las campanas de la parroquia y del Santuario de Nuestra Señora de la Esperanza, la multitud alababa y coreaba ¡vivas!

Con la hermosa imagen de la virgen, la procesión recorrió el atrio del templo, parte de la calle Morelos y dio una vuelta a la plaza principal, para retornar al templo siguiendo la misma ruta.

Realmente fue impresionante la cantidad de personas que se reunieron durante todo el recorrido.

Casi al terminar el recorrido, a la mitad del pasillo central del atrio, el Sr. Obispo y el Sr. Cura Cobos dieron la bendición con la imagen, bendición que fue recibida con respeto y alegría por la multitud.

Antes de colocar la imagen en el altar nuevamente se dio la bendición a los fieles que colmaron el templo así como a todo el pueblo y a toda la Diócesis.

Una vez que la imagen fue colocada en el altar, una gran cantidad de fieles formó una larga fila para pasar en orden y con respeto ante la querida imagen para tocar su manto y buscar su protección.

Durante la concelebración hicieron su Primera Comunión 3 jóvenes.

En el exterior hubo verbena en la plaza principal, amenizada por la banda de Los Once Pueblos de Huáncito. Como fin de fiesta se quemó un castillo.

Cabe destacar el hecho de que en esta fiesta el consumo de bebidas alcohólicas estuvo prácticamente ausente, a diferencia de las fiestas de otros pueblos en donde el consumo del alcohol es exagerado.

También es de mencionarse el amplio despliegue de policías municipales que realizaron un operativo especial a fin de mantener la seguridad y la tranquilidad de las miles de familias que disfrutaron de la fiesta.

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